La actividad coordinada por ING 2030 e InES GÉNERO contó principalmente con la asistencia de alumnas de la universidad y estudiantes escolares.
Barbarita Lara, ingeniera de Ejecución en Informática de la Universidad Técnica Federico Santa María, relató a niñas y jóvenes las diversas experiencias vividas a lo largo de su carrera durante la charla “Hack Yourself: rompiendo tus propias barreras”, con el fin de motivarlas a interesarse en el mundo de las áreas STEM.
La actividad se realizó en colaboración con el proyecto Ingeniería 2030 y ÆQUITAS InES Género, el cual pretende acortar la brecha de género en I+D+i+e.
A pesar del toque de humor presente durante la exposición, Lara realizó una profunda crítica a la serie de barreras que se imponen a las y los estudiantes desde temprana edad, como por ejemplo la asignación de roles de género. Al respecto, la ingeniera e inventora afirmó que las personas son “prototipos”, pues estamos en constante mejora.
Desde niña, Lara se interesó por la tecnología, durante los años 90, cuando creó sus “dos imperios”: el servicio de reparación de computadores a cambio de una “once” y la venta de juegos de Play Station. No obstante, en ese entonces jamás había sido consciente de todas las oportunidades que podía tener a futuro.
“Lamentablemente, pasamos doce años en el colegio y nadie nos enseña a emprender ni a innovar. Así que el llamado a estar acá es que aprendan desde el comienzo, porque se les va a hacer mucho más fácil. Yo estaba literalmente dentro de una caja”, comentó durante la charla.
Hackeando brechas
Barbarita Lara ha obtenido múltiples reconocimientos gracias a su proyecto SiE (Sistema de Información de Emergencia), el cual consiste en una aplicación que permite enviar mensajes de alerta en caso de emergencias por desastre natural, sin necesidad de conexión a internet o datos móviles, pues utiliza ondas de radio.
Sin embargo, aquel camino no ha sido sencillo, pues trabajar, ser madre, y estudiar en la universidad complicó sus primeros años en la educación superior, los cuales no estuvieron exentos de comentarios desalentadores. Incluso, en un principio, pocos tenían fe en el potencial de su proyecto, el cual surgió a raíz de la impotencia ante la nula alerta de tsunami durante el 27F en 2010, que resultó con decenas de víctimas fatales.
Por otro lado, la visibilidad en medios nacionales no fue hasta haber sido nominada y posteriormente premiada internacionalmente en el año 2018, cuando se convirtió en la primera mujer chilena en ser incluida en el “MIT Technology Review: Innovadores menores de 35 años LATAM”.
“Nadie es profeta de su propia tierra, yo creo que es un problema de cultura, más que otra cosa. No detectar talento cercano es algo normal, pero tenemos que ver a nuestro país como un desarrollador de tecnología, y no estamos acostumbrados a eso; a desarrollar innovación potente en Chile o en realidad no la vemos (…) Si quieres ser patriota, también puedes serlo así, reconociendo el talento chileno y valorándolo desde siempre”, reflexionó Lara.
Otros reconocimientos obtenidos por Lara corresponden al primer lugar en el programa “Líderes en Innovación” de la Real Academia de Ingenieros del Reino Unido, y recientemente, la primera edición del “Premio Ada Byron” este 2023.
Hoy en día, Lara se define como una apasionada por la innovación social y la educación STEAM (Ciencias, Tecnología, Ingeniería, Arte y Matemáticas) y se ha convertido en un modelo a seguir para las jóvenes chilenas interesadas en este mundo.
Durante la charla, la ingeniera enfatizó en que un punto clave para ser capaces de innovar está en tener un “propósito”, además de confiar en tus propias capacidades. En este sentido, aseguró que “uno se tiene que animar por sí mismo, uno debería valorar ese amor propio, que no se transforme en un amor propio o positividad tóxica, sino que en algo concreto. Yo lo voy a hacer por mí, yo estoy segura de que yo puedo ser una versión mejor de mí misma y que yo puedo seguir aprendiendo más, que puedo ser un ser polímata”.
“Mi consejo es que se hackeen a ellas mismas, que dejen de cumplirle a la sociedad y al mundo, que se cumplan a ellas mismas. Si les puedo dar un consejo es que no se rindan, nosotros podemos hacer posible lo imposible, nosotros con tecnología podemos cambiar el mundo. Nosotros tenemos la capacidad también de hacer cosas potentes, pero tenemos que creernos el cuento y está el momento de no solamente hackear el sistema, sino que también hackear la academia, pero más importante, hackearnos a nosotros mismos”, concluyó.